Bélgica/En Waremme, el Bois de la Tannerie escapa al hormigón y se convierte en el nexo verde entre barrios
El Bois de la Tannerie, en las afueras de Waremme, ha estado amenazado durante mucho tiempo por una urbanización que era demasiado grande para él, pero por fin se va a conservar.
Ahora la ciudad quiere salvaguardar este rincón de naturaleza, ofreciendo a los residentes un lugar para relajarse y explorar.
Pero el nuevo proyecto forma parte de una visión más amplia: reconectar los barrios a través de un tejido verde.
Actualmente se conserva el 85% de la zona arbolada
Un trocito de bosque en medio de la ciudad. Estamos en Waremme, en el Bois de la Tannerie. Como señala el alcalde Raphaël Dubois: "La ciudad siempre ha querido preservar el bosque. Hoy conservamos el 85% de la superficie arbolada, por lo que podemos decir que hemos cumplido nuestra misión".
Atrás queda el antiguo proyecto de construcción masiva, sustituido por un desarrollo ligero y educativo que respeta el ecosistema. " Es un verdadero alivio, porque el plan original era arrasar gran parte del bosque para dar paso a un complejo de hábitats y servicios", explica Hugues Vandensavel, del Plan Municipal de Desarrollo de la Naturaleza. "En este caso, estamos contentos porque el proyecto se ha reducido considerablemente, y eso significa que ahora el bosque pertenece al municipio, lo que nos dará una mejor visión de conjunto y una mejor gestión del lugar".
Un vínculo verde entre barrios
Y en el futuro, este bosque servirá de enlace entre los barrios gracias a una movilidad suave. "Es realmente el punto de unión entre el centro y la parte un poco más rural de la ciudad de Waremme, con el estanque, la piscina y el parque infantil. Así que es realmente un lugar central y esencial para la ciudad", comenta Olivier Dumont, concejal de Medio Ambiente.
Una elección que también aplaude su colega responsable de urbanismo, Julien Humblet. "Con este pulmón verde, vamos a poder conservar esta isla, esta zona de refugio para muchas plantas, y también para muchos animales. Es un pequeño extra, una pequeña gota en el océano, pero que creo que hará mucho bien a todo el mundo", afirma entusiasmado.
Está previsto que las primeras obras empiecen el año que viene.
Atrás quedará el antiguo proyecto de construcción masiva, sustituido por un desarrollo ligero, educativo y respetuoso con el ecosistema. " Es un verdadero alivio, porque el plan original era arrasar gran parte del bosque para crear un complejo de hábitats y servicios", explica Hugues Vandensavel, del Plan Municipal de Desarrollo de la Naturaleza. "En este caso, estamos contentos porque el proyecto se ha reducido considerablemente, y eso significa que ahora el bosque pertenece al municipio, lo que nos dará una mejor visión de conjunto y una mejor gestión del lugar".
Un vínculo verde entre barrios
Y en el futuro, este bosque servirá de enlace entre los barrios gracias a una movilidad suave. "Es realmente el punto de unión entre el centro y la parte un poco más rural de la ciudad de Waremme, con el estanque, la piscina y el parque infantil. Así que es realmente un lugar central y esencial para la ciudad", comenta Olivier Dumont, concejal de Medio Ambiente.
Una elección que también aplaude su colega responsable de urbanismo, Julien Humblet. "Con este pulmón verde, vamos a poder conservar esta isla, esta zona de refugio para muchas plantas, y también para muchos animales. Es un pequeño extra, una pequeña gota en el océano, pero que creo que hará mucho bien a todo el mundo", afirma entusiasmado.
Se espera que las primeras instalaciones abran el año que viene.
Fuente: www.rtbf.be/